SAMUEL MORRIS- PRÍNCIPE KABOO
Autor: Lindley Baldwin
(Tiempo estimado: 3 – 4 minutos)
Debo confesar que hace mucho no me leía un libro en menos de dos horas… en definitiva, una tarde de lectura súper especial. La historia de Samuel Morris, el joven príncipe africano reconocido en su tribu como “Kaboo”, realmente capturó mi atención y no la dejó ir hasta la última de sus 47 páginas.
El libro escrito por Lindley Baldwin es corto, deleitoso y de una sencillez que disfruté mucho. Habla sin pretensiones de la vida de un jovencito africano fallecido a la corta edad de 20 años en territorio americano, después de haber vivido una de las historias de liberación más impresionantes que yo haya leído nunca.
El día “viernes” -o como bien lo llaman en el libro “el día de su liberación”-, fue de algún modo también para mí un día de liberación literaria asombrosa. Me gocé al conocer esta recopilación completa de la vida real del príncipe cuya inspiración vino del cielo -sin lugar a dudas-, y del primer bosquejo biográfico del misionero Samuel Morris hecho por el doctor Thaddeus C. Reade.
Confieso que las historias del “apóstol de la fe sencilla” no solamente le dieron un deleite literario a mi intelecto, sino que, además, me confrontaron seriamente con mi propio tipo de fe: ¿en qué se basa realmente mi relación con el Señor?, ¿qué clase de intenciones esconde mi corazón de las cuales no soy plenamente consciente?, ¿hasta qué punto es mi deseo vivir una vida apasionada por Cristo? Inevitable no preguntarse todo esto en la medida que avanza la lectura de uno de los libros cristianos más simples y profundos que he leído.
Samuel Morris, el jovencito pobre y desventurado libertado milagrosamente de la mano de su opresor, sufrió penalidades que pueden tocar hasta las fibras más íntimas de nuestra sensibilidad. No solamente fue torturado severamente por los enemigos de su tribu por causa de ser el primogénito de su padre, sino que vivió seis meses viajando a través del océano Atlántico en medio de muchas situaciones con una tripulación malvada que desconocía el poder Salvador que otorga el Padre a través de Su Santo Hijo Jesucristo y por la obra de Su Espíritu Santo.
Dios fue el dueño único y total del corazón de Samuel Morris. Fue Él quien lo llevó a las aguas del océano para impactar con la luz del evangelio a marineros brutales y llegar a conocer a Esteban Merritt, quien le hablaría acerca del Espíritu Santo y a través de quien el Señor abriría camino a Morris en la Universidad de Taylor. Navegantes, obispos, profesores, predicadores y compañeros de universidad fueron impactados con poder por el Espíritu Santo a través de este “ángel de ébano”, y su muerte vino a ser incluso más fructífera que su propia corta vida.
“La vida de Morris prueba que el Espíritu invisible de Dios puede transformar a la persona más inverosímil, en un dirigente con poder y carisma” (p. 41) y prueba también que Dios quiere hacer con y a través de nosotros “obras aún mayores” (Juan 14:12). Por ello, ¡cuán importante es que Dios nos ayude realmente a superar nuestra incredulidad y a dejar atrás la dureza de nuestro corazón! Que no seamos de aquellos de los que habla el doctor Reade: “La mayoría de nosotros nos hemos desviado demasiado de la fe sencilla de la niñez, y Dios no puede hacer muchas obras poderosas en nosotros por causa de nuestra incredulidad”.
Una vez más, te animo a leer este corto libro. Descubre cómo llegó un jovencito africano a ser uno de los misioneros más importantes de los EEUU y de cómo su vida dejó un legado no solamente a la Universidad de Taylor, sino también a la obra evangelística en cientos de naciones del mundo entero. Siéntete desafiado por esta fe sencilla y permite que el fuego del Santo Espíritu de Dios avive tu vida para un verdadero liderazgo que impacte esta generación.
Para finalizar, te dejo con el último pensamiento del libro:
"Estos tiempos tempestuosos no son más que un "horno" en el cual el "oro" del liderazgo verdadero será probado y purificado, emergiendo triunfante. El evangelismo y la paz del mundo esperan a los nuevos dirigentes, quienes estarán equipados con toda la plenitud del poder de Dios morando adentro, por medio de la entera consagración y la fe completa de un Samuel Morris. ¿Dónde están los Samuel Morris de hoy día? ¡Es el tiempo para los nuevos hombres de los milagros!" (p.47)
Puedes descargar el libro completo aquí.
Dios te bendiga.
Qué invitación a la lectura y a tener plena fe en Dios tan hermosa ❣ Gracias por compartir con quiénes te leemos estos escritos tan valiosos
Muchas gracias por tu comentario, Valeria. Me complace saber que los textos que escribo son de bendición para tu vida.
Un abrazo.
Muchas gracias Andrea… De mucha bendición, en Dios estamos en un constante cambio, crecimiento. Nunca es tarde para tomar decisiones de un nuevo comenzar en Dios, ser más concientes del Espíritu Santo en nuestras vidas, que es Él quien actúa, quien habla, quien hace milagros. Nuestra tarea ser instrumentos de Él, decirle úsanos para tu obra, dejar de ser nosotros, dejar nuestros deseos, dejar la mirada en las cosas de este mundo y mirarlo a Él. La vida de Morris sin un peso, sin tener la mejor educación, ni la mejor presentación personal, es más sin mucha edad por que murió a sus 20 años y todo lo que le sirvió a Jesús por medio del Espíritu Santo.
Me recuerda mi Pastor Juan Manuel en el municipio de Fresno, hace poco falleció y todo el legado que dejó, toda su obra fue amor, mensaje de salvación para su pueblo, siempre guiado por el Espíritu Santo y hasta su último día con nosotros le sirvió a Jesús. Gloria a Dios por todas las vidas que se dejan usar por el Espíritu Santo y pido a Dios que seamos parte de la generación guiada por el Espíritu Santo y se cumpla la voluntad de Dios en cada uno de nosotros. Dios los bendiga.
Una reflexión muy especial y sentida, Yessly. Gracias por comentar y compartir todos esos pensamientos inspirados también en el corazón del Señor. Sea Él permitiéndonos vivir una vida abundante y rica en todo sentido, de modo que nuestro legado y herencia sean de mucha bendición para nuestra generación. Que podamos decir al final de nuestras vidas: “mi vivir ha sido Cristo y mi morir es ahora ganancia”.
Dios te bendiga.
Es un libro impactante, con un testimonio como pocos he conocido, cuanta santidad, valentia y amor, lloré con este libro, en las palabras de este libro puedes sentir la presencia de Dios. Que lástima que no exista editorial en las librerias para venderse. Es el libro que todo creyente debería tener. Bendiciones.
Es correcto, José Luis. Es un libro preciosísimo. Vale la pena leerlo, releerlo y meditar en sus enseñanzas. ¡Muy inspirador!
Dios te bendiga.