Site Loader

Hoy lloro, Dios, porque me apago:
me habla un muerto que maté
y ahora no sé qué hacer con él.
¡Oh, Señor! 
Dime… ¿qué hago?

Tengo un dolor a cuestas:
un dolor que hiere y atormenta,
un mal que pesa y no me suelta. 
¡Oh, Señor! 
No escucho tus respuestas.

Odiosas cargas impuestas
en un sombrío y gris desasosiego, 
que sin razón absurdamente niego.
¡Oh, Señor! 
¿Por qué estas propuestas?

Por favor, Señor, dime qué hago.
¡Es en serio que no puedo más con esto!
Mi corazón en vela está indispuesto,
y ya mi alma nunca satisfago.

¡Devuélveme ese muerto que maté!
¡Haz en mí lo que hiciste en Ezequiel
con esos huesos secos y sin piel!
Vuelve tu rostro y mira: ¡al muerto ya lo desaté!

Que tu corrección en mí no falte,
y que algo de vergüenza en mí quede.
¡Oh, mi buen Dios, esto a mí concede:
que mi vida sane y a ti exalte!

Andrea Suárez Salazar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete a mi blog

Si quieres recibir las últimas entradas de mi blog en tu correo electrónico, te invito a que te suscribas aquí.

Categorías

Calendario

marzo 2025
L M X J V S D
 12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930
31  

Suscríbete para obtener mis últimas publicaciones!

Te has suscrito correctamente al boletín

Se produjo un error al intentar enviar tu solicitud. Inténtalo de nuevo.

Encuentros con el Padre utilizará la información que proporcione en este formulario para estar en contacto con usted y proporcionarle actualizaciones.